La actual comprensión del uso de vehículos de ebriedad está determinada por un discurso médico-terapéutico, que concibe el cuerpo de los usuarios de sustancias La actual comprensión del uso de vehículos de ebriedad está determinada por un discurso médico-terapéutico, que concibe el cuerpo de los usuarios de sustancias
Desde un análisis histórico-discursivo revisaremos los discursos sobre la toxicomanía en su momento de emergencia e interrogaremos la economía que conceptualizó el uso de drogas como dominio de saber posible para la psiquiatría. Además determinaremos la conexión entre la comprensión de las diferentes formas de ebriedad con la biopolítica de las poblaciones ocurrida durante la primera mitad del siglo XX en Chile. Para ello se van a dilucidar los sustentos epistemológicos que configuraron en los relatos médico legales del periodo la peligrosidad de los usuarios de drogas.
Revisaremos los discursos médicos y jurídicos que configuran a un sujeto toxicómano en Chile y que confluyen para que en 1954 éste sea incluido como objeto de intervención en la Ley de Estados Antisociales, legislación en la que adquiere densidad normativa una discusión iniciada a fines del siglo XIX sobre comportamientos a intervenir por las instituciones y agentes normalizadores.
La construcción del fenómeno de uso de drogas como patología no corresponde a una sola área del saber. En el proceso entran en diálogo diferentes saberes, como la medicina, la psiquiatría, la química y farmacia; así como también la Medicina Legal y el Derecho. Para englobar todos estos discursos usaremos la noción foucaultiana de formaciones discursivas, las que hacen referencia a una serie de discursos que no necesariamente obedecen a una disciplina cerrada o un campo de saber homogéneo, pero que sí aluden a una inteligibilidad coherente de un fenómeno (Murillo, 1997: 34).